La cultura de marca como factor clave de crecimiento
Cuando se quiere desarrollar una estrategia de marketing, no sirve únicamente con saber qué es lo que hay que hacer, si no contar con personas que tengan la capacidad necesaria para llevarla a cabo. Aquí es donde entra en juego la cultura de marca, encargada de que estas personas estén conectadas con las acciones que les motivan.
Da igual si tu estrategia es la más efectiva que se ha visto nunca, es necesario ejecutarla como es debido. Otra forma de definir la cultura de marca es como el equilibrio existente entre las creencias, personas, actitudes y acciones que marcan el camino de una compañía, permitiéndoles que la implicación sea mayor en todas las partes.
¿Qué beneficios tiene la cultura de branding para un negocio?
Los beneficios que un negocio puede obtener de la cultura de branding son los siguientes:
1) Motivación
Existen unos objetivos ya planificados y los trabajadores conocen todo lo que tienen que hacer, esto provoca que exista una mayor lealtad a la compañía y consigue que estén más motivados para alcanzar las metas.
2) Foco
Todo el mundo trabaja para conseguir que la organización tenga un mejor rumbo de cara al mercado, alcanzando su visión, cumpliendo su misión y consiguiendo sus objetivos.
3) Conexión
Los diferentes departamentos no compiten entre ellos para saber quién desarrolla el mejor trabajo o quién lo consigue en el menor tiempo posible, todo lo contrario, trabajan en conjunto para llegar a las creencias que tienen establecidas.
4) Espíritu
El mal comportamiento de un solo empleado en el lugar de trabajo puede ocasionar graves pérdidas a la larga. Si se invierte un poco de trabajo en desarrollar el comportamiento de los trabajadores, se tendrá un mejor espíritu de trabajo y el cumplimiento de objetivos será más eficiente.
5) Cohesión
La uniformidad de la empresa estará más definida, ayudando a que toda la marca esté coordinada y cumpliendo con una coherencia previamente establecida.
La cultura como método para hacer crecer una marca
Existen unos apartados básicos donde es necesario centrarse si estás pensando en utilizar la cultura para mejorar la posición de tu empresa. Son los siguientes:
1) Liderazgo
Además de ser necesaria una persona que sepa cómo estar al mando, es necesario que sea buen comunicador para que no aparezcan dudas, fallos y/o problemas a la hora de establecer la visión y los valores de la compañía. Todo esto hará que el ambiente de trabajo mejore y se desarrolle rápidamente.
2) Valores
Nada de escribir los valores que se necesitan en una hoja y dejarla en el pasillo para que todos los trabajadores se la lean. El objetivo es dirigir el comportamiento hacia los valores que la empresa está buscando.
El proceso de contratación debe ser la primera toma de contacto para conocer si estos valores se existen. En caso afirmativo, lo único en lo que hay que centrarse es en potenciarlos y hacer que evolucionen.
3) Responsabilidad
Conforme se va adquiriendo la cultura de la compañía, también se incrementan los talentos, proporcionando una mayor responsabilidad para que las tareas se realicen de la mejor forma posible, permitiendo tomar decisiones que influyan positivamente en el camino escogido por el negocio.
4) Celebración
No hay que centrarse en celebrar únicamente los éxitos que tienen los trabajadores, también los fracasos. Es en este último caso es la única forma que existe de seguir avanzando y a modo de aprendizaje para toda la organización.